A este agosto atípico del que disfruta Cantabria aún le queda una jornada de vida. Para algunos volverá a ser día de chanclas, de helado, de playa o de terraza. O de abanico, botijo y ventilador. Si ayer la máxima en la región fue de 29,8 grados, hoy habrá nueva ración de calor, con temperaturas que en algunos puntos van a superar los 30 grados. Son los efectos de una masa de aire africano que deja secuelas en forma de registros históricos regionales para un mes de abril. El último, las temperaturas mínimas de ayer, que han sido las más altas nunca registradas en Cantabria.

El calor no se nota solo de día. Por la noche la calorina no termina de difuminarse. Donde más vienen acusando estos días esa sensación es en la zona oriental: ayer los termómetros no bajaron en todo el día de los 20 grados. Es una situación desconocida en los registros de Aemet para esta época del año.

Y quienes más directamente lo han padecido fueron los habitantes de Ontón y Treto, donde la mínima no bajó la pasada madrugada de los 21,6º y 20,2º, respectivamente. Nunca antes en Cantabria se pasó de los veinte grados en una noche de abril. A lo sumo se habían alcanzado 19 grados en distintos lugares y años. Por ejemplo, en el 73 en Parayas, en el 90 en Laredo o en 2003 en Santillana del Mar.

Fuente: El Diario Montañés (http://goo.gl/pInvu)